La vida, una aventura extraordinaria.

 Pi: “La duda es útil, mantiene viva a la fe. Nunca conocerás la fuerza de tu fe hasta que sea puesta a prueba.”

Todos tenemos un tigre que domar. Ese tigre son nuestros miedos. Sólo renunciando a todo, aceptando las situaciones, educando nuestro temple, carácter y debilidades, podremos crecer. Sólo al tocar el fondo del pozo, podemos emerger hacia la luz.. No existe la casualidad, sino la causalidad. No existe prueba, por dura que sea, que no podamos soportar, y de la cuál no saquemos una lección que nos haga mejores.
La vida está llena de obstáculos, de retos, de enseñanzas, de procesos, de caminos, de luz y tinieblas, de dolores y felicidad.
Aunque todo esté oscuro y no veamos el camino, aún en el momento más difícil, no debemos renunciar. Somos instrumento de Dios. El siempre nos cuida. Nos vigila de cerca, nos da señales y herramientas para alcanzar la cima. Somos importantes, somos parte de la divinidad, de la gran obra.
No pierdas nunca la Fe. Aprende a leer las señales. Escucha tu corazón, el siempre sabrá que hacer. Cree, agradece, ningúna situación es permanente.

La mejor forma de anular a una persona, es brindarle todo, y no permitirle desarrollarse. Estamos en un aprendizaje y una transformación constantes. Todo tiene un porque. Nuestra condición humana necesita conocer el mal, para valorar y apreciar el bien. Hay que llorar para aprender a reír. Caer, para levantarse. Sufrir, para gozar el bálsamo de una caricia. Perder, para valorar tener. Para dejar las necesidades banales. 

Dios nos puso ya en el paraíso. Y nos da libre albedrío, como un Padre que les da oportunidades y herramientas a sus hijos, para que puedan aprender, para que crezcan bien, y logren ser felices. Como una Madre, que nos vigila con el rabillo del ojo, desde lejos, atenta a nuestros pasos. Que siempre nos ayuda de alguna forma, que jamás nos abandona, pero que a veces nos deja caer, para que aprendamos a levantarnos. A ser rescilientes, a discernir el mejor camino, a ser capaces de caminar solos...
Nuestra Fe siempre será puesta a prueba. Somos libres de ser lo que queramos ser. De tenerlo todo. De soñar. De tocar el cielo. De volar, de hacer magia, y creer en milagros. No se puede cambiar algo, sin destruir lo que fue. Como la greda, que antes fue barro, ardió en el fuego y dio forma a un cántaro, donde hoy algún sediento, bebió y apago su sed...

Ese cántaro que alguna vez fue tierra. Una tierra que  tiene milenios, llena de pasos, huellas, minerales, células, átomos, restos orgánicos de plantas, animales y seres humanos que la habitaron, cuyos cuerpos se volvieron cenizas...
En el universo nada muere, todo esta en una transformación y evolución constante. Todos podemos cambiar, siempre se puede empezar. Todos somos uno, todos somos importantes. Amemos, volemos, soñemos, demos gracias por existir, por todo, siempre... Y nunca, nunca perdamos la Fe. Ahí recién habremos pasado la prueba, y seremos maestros, podremos enseñar, y realmente ayudar.

Pi: Nadie conoce a Dios hasta que te lo presentan. 

"La vida de Pi" símbolos: 

• Agua: Intervención de Dios, crecimiento espiritual. Lavado espiritual para sacar a flote el ego y domesticarlo. 

• Richard Parker: el ego. La lucha interna. "ese tigre no es tu amigo, cuando lo ves a los ojos sólo ves reflejadas tus propias emociones". 

• La isla: "la zona de confort."

• El día: los descansos en el camino. 

• La noche: quedarse sumido en la "zona de confort."

• Dia/noche: lo impermanente. Todo en la vida es pasajero.

• El diente: energía vital. Su pérdida, la muerte (espiritual).

• La flor de loto: la iluminación del alma. 

• Diente dentro de la flor, hallado en la isla: quedarse en la "zona de confort" conduce a la muerte espiritual. 

• Peces: son el alimento (del espíritu) o la transición a un espíritu purificado. 

     

Pi: ¿Y exactamente qué te dijo Mamaji?
Escritor: Que tenías una historia que me haría creer en Dios.
Pi: Yo sólo puedo contarte mi historia. Tú mismo decidirás en qué creer.

       

Namasté.